lunes, 17 de septiembre de 2018

MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA:

SEGUNDA SENTENCIA A REPRESOR QUE INTENTÓ SER LIBERADO POR EL 2X1 

El Tribunal Oral Federal 2 porteño el pasado viernes por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura cívico-milirar a Luis Muiña, el represor al que intentó liberar con la aplicación del “2x1” la Corte Suprema de Justicia.
Muiña, un civil que meses después del golpe de Estado integró una patota parapolicial, conocida como “Grupo SWAT”, que actuaba en el Hospital Alejandro Posadas, recibió la pena de prisión perpetua. 
En tanto, los otros dos imputados: el represor Argentino Ríos, un ex portero que conocía a todos los trabajadores y se transformó en clave a la hora de suministrar información al grupo de tareas, llegó al juicio con procesamiento firme por secuestros, torturas y asesinatos en el policlínico de Haedo pero murió impune el mes pasado; y el dictador Reynaldo Bignone quien falleció antes del inicio del juicio.
Muiña fue juzgado por los casos de seis víctimas, dos de las cuales fueron asesinadas: Jorge Mario Roitman y Jacobo Chester. Roitman era médico, fue secuestrado el 2 de diciembre de 1976 de su casa y llevado detenido-desaparecido a "El Chalet". Su cuerpo estuvo desaparecido hasta el año pasado, cuando fue encontrado de casualidad mientras se realizaban obras en los terrenos del Hospital. Chester trabajaba en el Departamento de Estadísticas y cumplía funciones en la guardia. Fue secuestrado de su casa el 26 de noviembre de 1976 y fue llevado detenido-desaparecido a "El Chalet". Su cuerpo apareció el 2 de diciembre de ese año en el Río de la Plata. 

En 2011 Muiña había sido condenado a 13 años de prisión en el primer juicio oral por crímenes de lesa humanidad en el Posadas aunque para la mayor parte de la sociedad fue un desconocido hasta el 3 de mayo de 2017, cuando la Corte Suprema de Justicia integrada por Carlos Rosenkrantz, Horacio Rosatti y Elena Highton de Nolasco pretendieron aplicarle el beneficio del 2x1, es decir computarle doble los días en prisión sin sentencia firme. Sin embargo, miles de personas se movilizaron a Plaza de Mayo y en plazas de todo el país para repudiar este fallo y lograron que el Congreso anulara en tiempo récord su original interpretación de una ley que había sido derogada antes de la reapertura de los procesos de lesa humanidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario